Donuts

La propagación de las ondas de radio en HF (de 0 a 30MHz), depende de la radiación electromagnética del sol y en menor medida del mismo efecto en la tierra. Poco o nada influyen las condiciones atmosféricas en el proceso, a no ser en aquellos fenómenos locales que afecten en una estación determinada… ante una tormenta eléctrica de verano, por ejemplo. Las condiciones de propagación existentes para ese día y hora serán iguales para otras estaciones cercanas situadas en la misma región, pero dicha estación estará perjudicada en su recepción por una perturbación local que se traduce en ruido.

Foto: Marc Simon Frei

Aunque las manchas del sol se vienen observando desde casi 30 años antes del nacimiento de Jesucristo, fue Heinrich Schwabe (Dessau, Alemania), el primero que observó la variación cíclica del número de manchas solares en 1826 (actividad electromagnética con amplias zonas negras que en ocasiones lanzan llamaradas de plasma a cientos de miles de kilómetros), y quién comprobó un patrón que se repite cada aproximadamente 11 años, entre el mínimo número de manchas y la máxima concentración de ellas.

A grandes rasgos y sin pretender entrar a desarrollar aspectos técnicos que podrían aburrir al lector no iniciado, podremos decir que a mayor cantidad de manchas, mayores distancias pueden ser cubiertas por las comunicaciones en HF, (aunque las llamaradas que también se producen pueden bloquearlas de tanto en tanto), y al contrario, cuando no hay manchas en la superficie solar (o solo una o dos), las comunicaciones en HF son menos eficientes, llegando a haber frecuencias elevadas dentro de ese rango de HF (a partir de 21MHz), con una nula actividad.

Esto ocurre porque la ionosfera (situada entre los 80 y los 500 km de altura), responde al bombardeo electromagnético proveniente del sol como si de un espejo se tratara, haciendo rebotar las ondas de radio que emiten las estaciones en la tierra cuando las manchas solares bullen en su superficie, y dejando escapar estas ondas al espacio, sin retorno, cuando las manchas son muy pocas o inexistentes.

Esta actividad varía con la época del año (dependiendo de la inclinación terrestre en relación con el sol), y la hora del día, existiendo diferencias sustanciales entre las frecuencias más altas (predominantemente diurnas), y las más bajas (más activas por la noche).

Dado que las ondas de radio se desplazan en línea recta, esta es la única forma en la que podemos contactar con otros lugares el globo.

En consecuencia, el radio de acción de una estación de Aficionado (o una emisora de Banda Ciudadana que trabaja en 27MHz), viene dado por lo siguiente;

Ambas tendrán un alcance directo (en línea recta y sin obstáculos), a cierta distancia en kilómetros que dependerá de su ubicación, potencia y la ganancia de su antena (conviene recordar que en CB solo se permiten 4W en AM/FM y 12 en SSB y el uso únicamente de antenas verticales de hasta 6db de ganancia, que dicho sea de paso son suficientes para alcanzar bastante distancia en directo si se tiene suficiente altura, como un monte por ejemplo, o para comunicar con los vecinos de nuestra ciudad o de las adyacentes de forma satisfactoria), y por otro lado son capaces de llegar al otro lado del planeta con muy poca potencia de darse las condiciones de propagación necesarias.

Además de lo explicado, cabe hacer notar algo curioso sobre el comportamiento de las ondas en su rebote en la Ionosfera;

En ocasiones somos capaces de realizar comunicados con estaciones a centenares o miles de kilómetros, mientras no recibimos a ninguna a una distancia mucho menor, donde nuestra emisión no llega por dos motivos;

Uno, porque no alcanzamos dicha zona en línea recta por estar más lejos de lo que cubre nuestra onda directa, y dos, porque el ángulo del haz de radiofrecuencia que rebota en la Ionosfera, es demasiado abierto.

Por ejemplo; en 7MHz (40 metros de longitud de onda), lo habitual es disfrutar de una cobertura de unos 1000 Km, pero en ocasiones la propagación «se alarga« debido al ángulo de rebote de nuestra señal de radiofrecuencia, que deja en zona de sombra ese mismo espacio de 1000 Km (que dejamos de recibir), pudiendo comunicar sin embargo al otro lado del Atlántico… en este clip que muestro a continuación yo escuchaba Puerto Rico, sin embargo ese día a esa hora (3 AM hora local, del 18 de Junio de 2017) no oí a ninguna estación europea ni española…

Y es que la propagación de las ondas en HF, tiene forma de Donuts (más o menos redondeada), con una parte «carnosa» (el radio de acción en el que están las estaciones que podemos contactar), y un agujero en el centro (en el que estarían aquellas estaciones en zona de sombra que no escuchamos).

Espero que la lectura les resulte interesante, y si es así, la compartan.

73 de EC1DJ.

Fuentes